sábado, 29 de julio de 1995

Mensaje de Nuestra Señora Reina de la Paz a Edson Glauber

¡La paz esté con vosotros!

Queridos hijos, soy la Madre de Dios y la Reina del Santo Rosario.

Yo, vuestra Madre Celestial, os invito a la conversión completa en Dios. Entregad vuestras vidas en las Manos de Jesús. Él es todo para vosotros y vuestro gran amigo.

Jesús, esta noche, os invita a abrir vuestros corazones. Entregad vuestras vidas a Él y seréis capaces de convertiros.

Yo, la Virgen de la Paz, os invito a rezar el santo rosario. Pequeñuelos, rezad el santo rosario. Abrid vuestros corazones, y de esta manera os alegraréis en mi Corazón y el Corazón de mi Hijo Jesús. También id a la Santa Misa muy a menudo.

No dejéis la Santa Misa de lado. Id a la Santa Misa para alabar y dar gracias a Jesús, porque yo estoy aquí, esta noche, para daros este mensaje celestial, y también para agradecerle por todo lo que ha hecho por vosotros, por vuestra conversión y salvación.

Yo, la Virgen María Madre de Dios, os invito a una vida más santa. Mirad mi Inmaculado Corazón. Él es vuestro refugio. Entrad en mi Corazón con vuestra consagración a mí y estaréis protegidos contra todo mal. Orad, orad, orad. Yo oro por vosotros cada momento. Seguid mi ejemplo. Os bendigo a todos: en el nombre del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Amén. ¡Hasta pronto!