miércoles, 18 de abril de 2018

Miércoles, Fiesta de San José, Esposo de la Madre de Dios

El Padre Celestial habla después de la Santa Misa Sacrificial en el Rito Tridentino según Pío V. a través de Su obediente y humilde instrumento e hija Ana.

En el nombre del Padre del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Hoy, 18 de abril de 2018, hemos celebrado una Santa Misa digna de Sacrificio en el Rito Tridentino según Pío V. Hoy celebramos la fiesta de San José, el esposo de la Virgen. Es una fiesta extraordinaria e importante.

Durante la Santa Misa del Sacrificio pude contemplar cómo San José levantaba tres veces al Niño Jesús. Nos mostró cuánto ama al Niño Jesús. Se me permitió sentir un intenso olor a lirio.

El altar de María, con la estatua de San José sobre él, estaba decorado como una alfombra de lirios. Los lirios encarnan la pureza de San José, porque hizo voto de castidad a los 12 años.

El Padre Celestial hablará hoy en el Día de San José: .

Yo, el Padre Celestial, hablo en esta Fiesta de San José, a través de Mi obediente y humilde instrumento e hija Ana, que está totalmente en Mi Voluntad y repite sólo las palabras que vienen de Mí.

Amado pequeño rebaño, amados seguidores y amados peregrinos y creyentes de cerca y de lejos. Hoy habéis celebrado una fiesta importante, la fiesta de San José, el esposo de la Madre de Dios. Esta fiesta fue establecida en 1870 por el Papa Pío Ix como fiesta patronal de toda la Iglesia.

Hoy debería celebrarse en vuestra iglesia doméstica en nombre de toda la Iglesia, porque debería haceros conscientes de que San José tiene una tarea importante para este momento tan difícil de la Iglesia actual.

Sobre esta falta de fe hablaste en detalle anoche. La Iglesia modernista yace y está devastada hasta lo irreconocible . .

Mi San José también mira a esta Iglesia. Quiere ser llamado e implorado, porque él también sufre con nuestra Madre Celestial por esta Iglesia. Incluso se le invoca como patrono de la Iglesia. Por favor, llamadle, porque veis que esta Iglesia está completamente devastada. Suplicadle constantemente y mantened novenas a San José . .

Amados creyentes, ¿aún podéis mirar? ¿No veis que hay que invocar a San José, sobre todo en estos tiempos difíciles, para pedirle e implorarle que vuelva a poner todo en orden?

Cuando le invoques, muchos ángeles estarán a su alrededor. Este grupo de ángeles te ayudará a resolver esta difícil tarea junto con San José .

Además, San José vela por tu casa en Mellatz. Vela con la Madre Celestial y el Santo Arcángel Miguel.

También allí se muestra como patrón . Se han calculado muchas cosas según sus deseos. Estuvo presente durante la construcción de esta casa y también durante la ampliación del jardín de invierno. Lo midió todo con exactitud, como no habrían permitido nuestros poderes humanos. Vosotros lo habéis experimentado, amados míos. A menudo era como un milagro, porque las imposibilidades se hacían realidad. Sólo pudisteis maravillaros de ello y muy pronto os disteis cuenta de que el cielo estaba actuando. Eso os hacía felices, por supuesto . San José se sentía responsable de vosotros, porque todo se hacía según el plan del Padre Celestial. Habríais pasado por alto muchos errores, porque sois y seguís siendo personas falibles.

Deseo que sigáis invocando a Mi amado Patrono San José para que esta crisis de la Iglesia se resuelva en apostasía .

El sacerdocio actual no yace en la pureza . Todavía irá tan cuesta abajo y todavía llegará tan lejos que el celibato será abolido y las sacerdotisas celebrarán el Sacrificio de la Misa en el altar. Ya están en el punto de partida .

Este actual Gran Pastor, que ocupa la Silla Suprema, ya ha causado tantos males que ya no se pueden comprender.

¿Significa esto que ahora Mi Santa Iglesia, que fundó Mi Hijo Jesucristo, está completamente destruida? ¿Está ahora tan destruida que la Santa Iglesia Católica ya no es reconocible? «Pero las puertas del infierno no podrán con ellos». Esto es lo que dice Jesucristo. Yo, el Padre Celestial, a través de Mi Hijo Jesucristo, remodelaré y reviviré la nueva Iglesia en un hermoso esplendor de gloria.

Proclamo de nuevo que esta gloriosa Iglesia comenzará en la pequeña y discreta aldea de Mellatz .

Eso, amados míos, no podéis comprenderlo. No tenéis a la vista ni el pasado, ni el presente, ni el futuro. Pero Yo, Mis amados, sé todo lo que ocurre en Mi Iglesia, en la Iglesia de Mi Hijo Jesucristo. .

¿Cuánta amargura ha soportado Mi Hijo Jesucristo? Por eso, Mi amado hijo sacerdote Rudi, tú también tendrás que beber el amargo cáliz que Mi Hijo te da. Tendrás que sufrir mucho que no podrás comprender. Sólo lo superarás con la gracia de Dios, pues ésta obrará en ti en el tiempo señalado. Con esta gracia salvarás a la diócesis de Hildesheim. .

Sigue siendo Mi hijo sacerdotal ordenado en el orden de Melquisedec, pues eres sacerdote para siempre. Tu hora de consagración estaba destinada a ti y has seguido esta gracia. Yo fui el primero y el más importante para ti en esta hora de consagración, aunque no te diste cuenta.

Además, has hecho el juramento antimodernista. Aunque entretanto no lo hayas cumplido, este juramento permanece. Un juramento permanece, aunque entretanto no lo hayas cumplido, pero este juramento permanece. Permanecerás fiel a este juramento.

Todo lo que Yo deseo de ti, tú Me lo cumplirás, pues eres el modelo de muchos sacerdotes. Eres el modelo de muchos sacerdotes de la diócesis de Hildesheim que están dispuestos a recorrer este difícil camino.

El obispo que te llamó ayer, Mi amado hijo sacerdote, sigue al frente de la diócesis y es también responsable de esta diócesis.

Las corrientes de gracia que fluyen de tu Santa Misa de Sacrificio están destinadas a tu diócesis. Tendrán un significado importante en esta diócesis para el futuro.

Todavía no te será dado a conocer, pues sería demasiado pronto para que pudieras captarlo. Aún eres demasiado débil, pero fuerte en mi gracia.

Lo lograrás todo si te orientas enteramente hacia mí. Todo sucederá según mi plan, si te pones enteramente en mis manos. En toda santa transformación eres enteramente mía. Yo estoy en ti y tú en mí. Mi amado hijo sacerdotal, no te has quitado las vestiduras sacerdotales, éste es un gran regalo que Me has hecho. Entonces puedo obrar en ti. .

Los demás sacerdotes de tu diócesis ya no llevan ropas sacerdotales. Sin estas vestiduras no pueden ejercer el sacerdocio. No sólo son modernistas, sino que pertenecen al mundo. Todo lo que ocurre en el mundo es importante para ellos, porque desgraciadamente no reconocen el verdadero camino de la fe, que sólo está anclado en la fe católica .

Hoy ya no saben lo que significa la ordenación sacerdotal y el sacerdocio. La unión con su Maestro y Salvador ya no tiene lugar en ellos, pues ya se han separado de su Salvador sin haberse dado cuenta.

En la transformación sucede algo muy significativo e importante, que siempre seguirá siendo un misterio de Dios y que no se puede comprender. En ese momento, cuando Jesucristo, el Hijo de Dios, realiza la transformación en manos de los sacerdotes, los ángeles del cielo se regocijan. Se postran y adoran el lugar santísimo con gran reverencia.

Recuerda que en ese momento ya no eres tú, sino Yo en ti. .

Recuerda que Yo estoy en ti en cada Santa Fiesta Sacrificial que celebres.

Sé Mi vigilante y fiel hijo sacerdotal, que recorre todos Mis caminos que te revelo. Agradece tu ordenación sacerdotal, que Yo he realizado en ti. Por supuesto que exijo mucho de ti y ya te he exigido mucho.

Te agradezco los muchos años que me has dado en la Santa Misa de Sacrificio Verdadero y que celebras desde hace 12 años aquí, en esta iglesia doméstica de Gotinga. Así se renueva el sacrificio de la Cruz de Mi Hijo Jesucristo en todos los altares donde se celebra la Fiesta del Sacrificio .

Reconocerás muchas cosas pieza por pieza sólo porque serán incomprensibles para ti. Todo lo que suceda en el futuro tu mente no será capaz de comprenderlo. Muchas cosas estarán reguladas, aunque no las comprendas. Entonces, tómalo como es.

También con Mi pequeña Katharina estoy contigo. También la llevaste contigo, pues adoraba mucho a San José. Ella está en el cielo y celebra allí la fiesta de San José. Ella te ayudará en este día. Todo lo que ha de suceder y que está en el plan del Padre celestial sólo sucederá de forma distinta a la que pensáis. Sucederá, no según el plan de vuestra diócesis. No está en el orden, porque se hará según mis deseos y no los tuyos.

Un pequeño grupo de cuatro personas no puede imaginar ni pensar en muchas cosas que tiene para una tarea tan trascendental. He dicho cuatro personas porque estoy incluyendo a Mi pequeña Katharina. Ella sigue con vosotros, aunque está en el cielo. Tampoco podéis comprenderlo, pero es así. Ella estaba en el pequeño rebaño y en su vida formó parte de él. Hasta el final de su vida no me dijo que no quería pertenecer a este pequeño grupo. Por eso sigue perteneciendo a esta comunidad de cuatro en el cielo. Cuando tú, hijita mía, renuevas la triple alianza, me has preguntado si esto sigue siendo conforme a mi voluntad. He respondido afirmativamente a esta pregunta. Lleva a tu Katharina a la triple alianza, aunque sufras mucho por ella e incluso sufras inconmensurablemente.

Ella podrá ayudarte en esta comunidad de tres. Lee muy intensamente esta alianza cuando la renueves. Entonces sentirás que ella está contigo. La alianza a dos también sigue vigente. Rezadla todos los días, entonces podréis sacar mucha fuerza para el tiempo venidero.

Te bendigo ahora con todos los ángeles y santos, con tu queridísima Madre Celestial y, sobre todo, con tu queridísimo Esposo, San José en la Trinidad, en el nombre del Padre del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Prepárate para asumirlo todo en el tiempo venidero y sé un ejemplo para la Nueva Iglesia que viene. Amén.