viernes, 3 de diciembre de 2021

Oraciones del Rosario del Cenáculo

Mensaje a Valentina Papagna en Sydney, Australia

El Señor Jesús dice que el mundo está en Desolación Total y Desesperación

Hoy, durante las Oraciones del Rosario del Cenáculo, mientras ofrecíamos nuestras peticiones, nuestro Señor Jesús se apareció y dijo: «Valentina, hija Mía, quiero que Me ofrezcas el mundo entero, y que reces por él. Sé que puedes hacerlo. Todas las oraciones Me ayudarán a salvar el mundo».

«Ahora el mundo está en total desolación y desesperación, y necesitan Mi ayuda».

« Por el momento, estoy dispuesto a dejar a un lado Mi Juicio, y adelanto Mi Misericordia, para salvar al mundo. Pero necesito tu ayuda para hacer todo esto. Quiero que difundas Mi Santa Palabra y digas a Mi pueblo que rece " .

Mientras Nuestro Señor estaba presente en la iglesia, y mientras me daba este serio mensaje, de repente me elevó por encima del horizonte.

Un momento, estaba en presencia de nuestro Señor, arrodillado en el banco y orando, cuando de repente, y en un instante, nuestro Señor me levantó, me elevó muy alto, muy por encima del horizonte, por encima de las nubes. De pronto pude ver claramente el mundo que había debajo de mí, cubierto de nubes.

Ahora me encontraba en algún lugar del espacio exterior, con nuestro Señor Jesús de pie frente a mí, mientras yo me arrodillaba ante Él. Vestía una hermosa túnica de color crema intenso. La expresión de Nuestro Señor era triste.

Al mismo tiempo, desde muy abajo, oía claramente el eco de las oraciones del rosario recitadas por nuestro grupo de oración del rosario y que se elevaban. Oía a la gente responder. Podía reconocer sus voces. Las oraciones resonaban hacia arriba, hacia el espacio, para que el Señor pudiera oírlas. Las oraciones se elevaban al Cielo.

Ahora podía ver cómo las oraciones, cuando son sinceras y de corazón, viajan y resuenan por el espacio.

Estaba por encima del mundo y de las nubes, arrodillada ante nuestro Señor.

Nuestro Señor miraba al mundo de abajo. Dijo: «Os digo que ahora, mire donde mire, hay abominación y desolación y tinieblas. La mayor parte está causada por este horrible virus y por el mal que se extiende por todo el mundo. La gente está desesperada y está perdiendo la esperanza en sus vidas».

Me miraba, preocupado por el mundo, pero al mismo tiempo sonreía un poco, señal de esperanza para el mundo.

Me pidió: «Ayúdame, y juntos podremos llevar la luz al mundo y salvarlo todo».

Asintiendo suavemente con la cabeza de forma esperanzada, dijo: «Todo esto se puede conseguir con oraciones».

Preguntó: «¿Puedo contar contigo?».

«¿Puedo?» Volvió a preguntar.

«Di a Mis hijos que se tomen en serio Mi mensaje».

«Os bendigo. Quédate en paz».

De repente me encontré de nuevo en la iglesia, arrodillada en mi banco con mi grupo de oración, rezando el Rosario del Cenáculo.

Al día siguiente hablaba con el Señor: «Señor, me gustaría contárselo a todo el mundo. ¿Cómo voy a hacerlo? ¿Cómo voy a decirle a la gente que rece por el mundo?».

El Señor Jesús dijo: «Nunca hago nada si no aviso a Mis hijos antes de tiempo».

Nuestro Señor siempre nos da una oportunidad para que las cosas cambien a mejor. Quiere salvar al mundo, y desea mucho que recemos por el mundo.

Señor, ten piedad del mundo entero.

Origen: ➥ valentina-sydneyseer.com.au