Mensajes de diversas orígenes

 

viernes, 24 de diciembre de 2021

Australia da más Dolor a nuestro Señor

Mensaje a Valentina Papagna en Sydney, Australia

 

Nochebuena

Durante mis oraciones vespertinas del día anterior, me lamentaba ante nuestro Señor: «Señor, ahora nos imponen tantas restricciones, y hay tanto dolor y enfermedad en el mundo. Hace unos años, Tú me dijiste cómo una hermosa paz desciende sobre la Nochebuena en todas las naciones del mundo».

«¿Quizá ocurra un milagro este año?». Dije: «Porque Tú lo permitirás. ¿Quizá todo vaya bien y no haya más Coronavirus?».

Esta mañana, mientras rezaba, vino nuestro Señor Jesús y dijo: «Anoche oí tu súplica».

«¡Pero os digo que Australia es la que más dolor Me causa de todas las naciones! Te diré por qué».

Me lo mostró; era como si un fino trozo de acero, una varilla, presionara sobre el tejido blando y sensible entre los Dedos de los pies de nuestro Señor, como inmovilizándole. Le está presionando constantemente, de modo que siente un dolor terrible. Es extremadamente doloroso. Pude ver la fina barra de acero que se extendía desde Australia hasta el Cielo.

«Así es como recibo el dolor de Australia», dijo.

«Me lo envían desde Australia hasta el Cielo. Es un dolor constante».

«A la gente de Australia le gusta tener buenos momentos, cosas buenas, le gusta viajar, le gusta ganar dinero y divertirse. Son avariciosos, se preocupan de cuánto dinero van a ganar, todo por su propio interés. Les gusta mantener la industria en marcha para obtener grandes beneficios. Quieren hacerlo todo bonito, más que ninguna otra nación del mundo, pero no quieren aceptar ningún sufrimiento que les llegue. Se quejan constantemente. Quieren hacerlo todo como antes. Todo es 'yo, yo, yo', y no se preocupan de los demás».

El Señor Jesús se lamentó: «Pero nadie quiere arrepentirse. No se preocupan del arrepentimiento».

«Hoy me voy a ofender mucho, porque cuando la gente se reúne, muchos hacen fiesta y beben». Nuestro Señor estaba muy serio y molesto por lo de Australia.

Le dije: «Señor, lo siento mucho. No toda la gente lo sabe».

Señor, ten piedad del pueblo de Australia y de Tus sacerdotes.

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Origen: ➥ valentina-sydneyseer.com.au

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