domingo, 27 de julio de 2025

Conviertan sus corazones al Dios del Amor y apártense por completo de las seducciones de este mundo

Mensaje de la Santísima Virgen y Nuestro Señor Jesucristo a Myriam Corsini en Carbonia, Cerdeña, Italia el 23 de julio de 2025

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, os bendigo, hijos míos.

Amados hijos, Yo soy la Santísima Virgen, desciendo del Cielo para visitaros y acompañaros en esta dolorosa ascensión.

Os abrazo a Mi Seno y

les doy el amor de Mi Hijo Jesús,

os traigo los dones del Espíritu Santo,

os concedo todo el amor del Espíritu, del Padre, del Hijo y de la Madre.

Amados hijos, ha llegado el momento. Ahora comenzarán las penas en la Tierra: sufrirán mucho todos aquellos que están lejos del amor de Jesús y no lo reconocen como Dios, que lo impugnan y prefieren seguir al Maligno porque les ofrece una vida más fácil, llena de entusiasmo y lujuria.

Amados hijos, ¡¡¡si supieran cuánto los amo!!!

Cómo deseo llevaros Conmigo a la Tierra nueva y daros la alegría de todo lo que vuestro Creador ha preparado para vosotros, ¡Sus hijos amados, Sus joyas, la luz de Sus ojos!

Él os creó con todo el amor de un Padre y de una Madre, con todo Él mismo, para daros la alegría de la vida eterna.

Pero este mundo se ha vuelto invivible, ¡asqueroso! Satanás ha conseguido robar muchos corazones, los ha seducido con astucia, el hombre ha caído en su trampa porque se ha hecho débil, se ha despojado del Escudo de nuestro Señor Jesucristo para luchar contra Lucifer.

¡He aquí que han llegado los días anunciados por las profecías!

Amados hijos, ¡¡¡vuestros ojos lo verán!!!

El hombre experimentará la llegada de una catástrofe general y caerá en la desesperación por no haber escuchado y seguido las sugerencias del Cielo.

Yo os he creado libres y os dejo libres para que toméis vuestras propias decisiones, ¡dice nuestro Señor Jesucristo!

He aquí que el Señor Dios os habla, ilumina vuestra mente, abre vuestro corazón, ¡escuchad Su voz, no la de Satanás! Convertid vuestros corazones al Dios del Amor y apartaos completamente de las seducciones de este mundo.

Pronto no quedará nada bueno en esta Tierra... se oirán los gritos desesperados de los hombres.

Pero vosotros, amados hijos, seréis impotentes. Hasta que Yo os dé la orden de intervenir, debéis permanecer en vuestro lugar, hijos Míos, escondidos, en silencio, y debéis orar.

Proclamad el Santo Evangelio, difundid Mis mensajes por todo el mundo.

Origen: ➥ ColleDelBuonPastore.eu