sábado, 29 de junio de 2002

Sábado, 29 de junio de 2002

Mensaje de San Tomás de Aquino dado a la Visionaria Maureen Sweeney-Kyle en North Ridgeville, EE. UU.

San Tomás de Aquino viene. Se inclina ante el Monstrancio y dice: "Alabado sea Jesús."

"Cuidado con el alma complaciente. Tal alma que no busca una espiritualidad más profunda es un alma tibia. Su propia satisfacción amenaza su propia salvación; pues el Señor ofrece y él rechaza, pensando que no necesita más autoconocimiento--tiene toda la gracia que necesita. Esto es lo mismo que la autojustificación. Es tal santimonía en los corazones la que rechaza la revelación privada, presumiendo que no necesitan nuevas devociones, y ciertamente ningún consejo 'supuesto' del Cielo."

"Los que son como estos piensan que tienen las respuestas y creen que están salvados. Pero con la misma respiración, pasan por alto lo obvio--la oportunidad de volverse santos y entrar en el Reino sobre las alas del amor y la humildad. Sí, es una cosa muy peligrosa ser complaciente--ser espiritualmente engreído. Es una señal para el Cielo de que solo estás interesado en la salvación en tus propios términos."

"Cuidado con esta trampa que Satanás te tiende a cada uno."