Mensajes a Edson Glauber en Itapiranga AM, Brasil
miércoles, 31 de enero de 2001
Mensaje de San José a Edson Glauber

Mi querido hijo, la paz sea contigo y con todos.
Hoy, derramo las gracias de mi Corazón Santísimo sobre toda la humanidad. Dios desea que toda la humanidad sea beneficiada por su gracia, a través de la intercesión de mi Corazón con Él.
Amo a la humanidad y deseo que se acerque a mí, porque quiero ayudarla a caminar cada vez más hacia el cielo, hacia Dios.
Debes decirle a tu obispo, que mire bien, analizando todo con amor y discernimiento, lo que Jesús y la Bienaventurada Virgen, mi Esposa, han logrado en Itapiranga.
Itapiranga es una gran gracia y regalo de Dios al pueblo del Amazonas, y a la humanidad. Itapiranga siempre debe ser mejor conocido por los hijos de Dios, porque el mensaje que fue transmitido allí será para la salvación de muchas almas.
Los sacerdotes deben saber respetar las obras del Señor. ¡Qué triste está Dios cuando los sacerdotes, sin saber nada de los mensajes y las apariciones, las critican y se burlan de ellas! Estos son peores que los escribas y los fariseos. Estos son los Tomás de hoy.
Sacerdotes, el Señor los llama a una profunda reflexión sobre sus actitudes. Sean más cuidadosos y celosos por las obras del Señor, porque lo que Él hace es por la salvación de su pueblo, que ha sido dejado de lado y abandonado por muchos de ustedes, que por su mal ejemplo, no han vivido su vocación y su ministerio como deberían.
Oren al Espíritu Santo, y Él los ayudará a ser fieles a su vocación. Pidan mi ayuda y vendré a su auxilio. Los bendigo a todos: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. ¡Amén!
Orígenes:
El texto de este sitio web se ha traducido automáticamente. Por favor, disculpa cualquier error y consulta la traducción al inglés.