domingo, 30 de mayo de 2004

Mensaje de Nuestra Señora Reina de la Paz a Edson Glauber en Manaus, AM, Brasil

¡La paz de Jesús esté contigo!

Queridos hijos, los amo y les digo que los acojo en mi Inmaculado Corazón. Gracias por su presencia.

Hoy les digo que continúen rezando y Dios derramará muchas gracias sobre ustedes y sobre el mundo. Pidan cada día la luz del Espíritu Santo y Su gracia, y sus vidas serán transformadas y renovadas. Pidan a Jesús su fuerza para que no se desanimen ante las pruebas, sino que sepan superarlas con paz y serenidad.

A través de la oración el Señor les concederá miles de gracias. Oren y la luz de Dios brillará en sus vidas. Los bendigo y los cubro con mi manto inmaculado. Los bendigo a todos: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. ¡Amén!

Antes de irse, la Virgen dijo:

Mañana volveré. ¡Quédense en paz! ¡Hasta pronto!

El 31, el mensaje que la Santísima Madre dijo fue personal. Bendijo a todos los presentes en la aparición. ¡Qué generosa es al conceder gracias! La gente solo entenderá esto cuando muera y vea lo que la Virgen ha hecho por ellos y sus familias.