miércoles, 29 de octubre de 2014

...¡incluso de Mi santa iglesia!

- Mensaje nº 732 -

Hija mía. Mi querida hija. Escribe, hija Mía, y escucha lo que Yo, tu Santo Padre del Cielo, tengo que decir hoy a los hijos de la tierra: Sólo Mi Hijo, Jesucristo, es vuestro camino hacia Mi gloria. Sin Él estaréis perdidos. Así que levantaos, Mis amados hijos, y dadle vuestro ¡Sí! Así Él obrará en vosotros y a vuestro alrededor y os ayudará a encontrarme a Mí, vuestro Padre.

Hijos Míos. Id a Jesús ahora y no esperéis más, porque el mal es lo que hace el demonio, y quiere adormecer a todos aquellos que aún no han encontrado a Mi Hijo. Sus medios son astutos y están muy bien camuflados. Os distrae de lo esencial, ¡para que no miréis detrás de su malvado juego!

¡Hijos, estad prevenidos, pues el que no se consolide en Jesús estará perdido para su adversario! Los trucos y las artimañas que utiliza son tan astutos que pensáis que todo va bien y no veis el peligro, pero, hijos, tened cuidado, porque os está atrayendo en todos los ámbitos, incluso fuera de Mi Santa Iglesia , el Cuerpo de Mi Hijo aquí en la Tierra. Debéis confiar sólo en Jesús y no escuchar a los que vienen. Os ciegan, ¡y cada vez os preparan más el camino al infierno!

Hijos míos, estad prevenidos, porque ¡el fin ha comenzado! Así que corred ahora a Jesús y salvaos, ¡porque sólo Él está autorizado a traeros a Mí!

Confesaos, hijos Míos, y salid del mundo ilusorio de la bestia. Aún os traerá mucho mal, ¡pero debéis ser fuertes y confiar plenamente en Jesús! ¡No aceptéis nunca la marca de la bestia, porque os costará la eternidad!

Refugiaos completamente en los santos brazos de Mi Hijo y orad, hijos Míos. En la oración estáis muy cerca de Mí y de Mi Hijo, así que utilizadla para vuestra salvación y para la conversión de vuestros seres queridos, y como arma en la lucha contra todo mal, ¡que detendréis y detendréis hasta el final con vuestra oración!

Rezad, hijos Míos, y estad muy cerca de Mí, vuestro Padre que tanto os ama. Os espero, porque os amo, ¡y Mi felicidad será completa en cuanto sepa que os habéis salvado!

Amén, hijos Míos.

Venid y dad vuestro Sí a Jesús, entonces nada se interpondrá en vuestro regreso a casa. Que así sea.

Vuestro Padre que está en los Cielos.

Creador de todos los hijos de Dios y Creador de todo ser. Amén.