domingo, 24 de octubre de 2021

Si amas a tus seres queridos, ¡no les niegues la oportunidad! ¡Quien no esté preparado no reconocerá la astucia y el engaño que comenzarán después de la advertencia!

- Mensaje nº 1323 -

Hija mía. Muchas verdades están saliendo ahora a la luz y, sin embargo, muchos hijos siguen durmiendo. Están demasiado cómodos para arrepentirse, y mientras (aún) les vaya bien, no temen nada. Prefieren ceder a perder su comodidad. Reza por ellos, para que se arrepientan y su comodidad no les cueste la eternidad.

Amados hijos que sois. El tiempo es corto y golpe a golpe seréis invadidos por el mal y sus maquinaciones. No temáis, pues el Padre escucha vuestras oraciones. Aquel Que Es Todopoderoso intervendrá, pero antes se dará a cada hijo, a cada persona, a cada alma, la oportunidad de arrepentirse. Quien entonces no esté despierto, quien entonces no me haya confesado a Mí, su Jesús, por él verdaderamente no podré hacer nada.

Amados hijos del ejército remanente. El momento se acerca y debéis perseverar. Manteneos fuertes y fieles a Mí, vuestro Jesús, y rezad, rezad, rezad. Los rosarios de Mi Madre obran muchísimos milagros. Rezadlos diariamente para que permanezcáis firmes y para la conversión de muchas más almas. Os doy las gracias por ello. Mi Madre está con vosotros , con todos los que le rezan sinceramente. Ella es corredentora y líder de esta misión tan maravillosa. Muchos hijos ya se han vuelto atrás, pero muchos también han permanecido en silencio, que se os diga:

Proclamad Mi Palabra y preparad a vuestros seres queridos, amigos, familia para los acontecimientos. Aquellos que no se hayan convertido con la advertencia se perderán , y el tiempo está cerca , está tan cerca . Así que si amas a tus seres queridos , no les niegues la oportunidad de vivir Mi advertencia como el acontecimiento que es: un gran acto de Mi misericordia para todos los hijos del mundo, y tu última oportunidad de encontrar el camino hacia Mí, hacia tu Jesús. Quien no aproveche esta oportunidad, se juega su eternidad , y quien lo sepa y guarde silencio, ¡Peca contra su prójimo! Así que escuchad Mi palabra y preparaos vosotros y vuestros seres queridos.

Atravesaréis tiempos difíciles, pero quien esté verdaderamente Conmigo los superará. No os cerréis a la verdad, pues si lo hacéis, os cerráis a la eternidad en la gloria. Prestad atención a Mi palabra, porque todo viene golpe a golpe. Cuando se cierren vuestras iglesias, bien al que ya está Conmigo, con su Jesús, y soporta este tiempo oscuro . Estad preparados, porque el maligno está al acecho, y pronto, muy pronto, se os presentará como el que No Es.

Así que estad preparados, amados hijos, estad preparados. El juego del mal hace tiempo que ha comenzado, y no hay vuelta atrás a la normalidad. El maligno lucha contra cada uno de vosotros, y a todos vuestros seres queridos los combate. Entonces, ¿por qué os rendís ante él en lugar de «luchar» por vosotros mismos y por vuestros seres queridos? Vuestra oración es y será siempre el arma más fuerte que tenéis.

Así que rezad y suplicad al Padre, porque Él mitigará, intervendrá, pero sólo Sus verdaderos hijos serán elevados. Yo, tu Jesús, Soy el camino hacia la eternidad. Yo Soy la llave del Nuevo Reino, y ese día está cerca, está muy cerca.

Convertíos , los que aún no estáis Conmigo, despertad, los que no queréis (reconocer) la verdad , no os mintáis diciendo que todo es bueno. Nada es bueno, hijos Míos, nada es bueno, porque el maligno luchará contra vosotros hasta el final, y sólo podréis ganar esta batalla si sois honestos y totalmente Conmigo, con vuestro Jesús.

Hijos Míos. Mis tan amados hijos. Levantaos ahora y daos cuenta de donde estáis , porque el maligno os está alcanzando , y golpe a golpe todo llegará. El que no esté preparado , amados hijos que sois, no reconocerá la astucia y el engaño que comenzarán tras la advertencia. Así pues, estad prevenidos, porque el que viene es el propio maligno. Se instalará en Mi Santa Iglesia, será celebrado como Salvador y Pacificador, y yaceréis a sus pies si no despertáis ahora.

Con profundo amor y un corazón dolorido, me despido hoy de vosotros.

Tu Jesús. Que está sufriendo. Mucho. Por vosotros, hijos Míos. Por vosotros. Amén.

Están muy llenos de dolor: Dios Padre, Nuestra Señora, Jesús, los santos y los ángeles.

Sí, hija Mía. El fin está cerca y los niños deben despertar ahora. Amén. Ahora vete. Tu Madre del cielo. Amén.